sábado, 24 de marzo de 2012

Destino al Paraíso.

Al fín cambió mi rumbo .....sigo tu señal

La mera idea de  quedarme solo en una isla desierta me da tanta paz, que hasta algunas veces creo que lo ansío y lo necesito , simplemente quedarme a escuchar el sonido de las palmeras cuando el aire las mece, el mar en sus noches de bohemia, y la luna con sus mareas, hacen que la sensacion que se me quede en el cuerpo sea la de un inmenso cansancio profundo en el que ya no pueda ni flotar en el agua, a pesar de que esta esté llena de sodio. Una noche con luna, con arena, con calor, y con muchas estrellas es lo que necesito, si una persona está llena de necesidades y tiene que hacer lo posible por cubrirlas, yo lo soy más, necesito cubrir todas mis necesidades sean como sean , así, que  mi proximo destino es como no, el Paraíso, pero algo me dice que esta vez no quiero ir solo.